Cumplido un año y una semana del colapso de la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México, El periódico El País reveló este lunes que tuvo acceso al tercer peritaje realizado por la compañía noruega Det Norske Veritas (DNV)., que la mandataria Claudia Sheinbaum hace una semana calificó como “tendencioso y falso”, y que debido a tal, su gobierno iniciaba el proceso de la recisión de contrato.
 
El informe realizado por la empresa explica fueron distintos factores que provocaron la tragedia (que conllevó a 26 muertes), los cuales van desde; que “la obra no se ceñía a lo que estipulan las especificaciones estadounidenses para la construcción de puentes, un estándar de referencia en el mundo” , hasta “la falta de una basica instalación adecuada de los pernos que comprometió la integridad de esta estructura”.
 
Este tercer y último peritaje de Det Norske Veritas sobre el desplome, explica los factores, y todos hablan de puntos claves tecnicos, pero ¿Por qué no presentar puntos clave estrategicos politicos del suceso?
 
¿Quién está culpando a Sheinbaum, y por qué?
 
Ya se dijo que desde la administración de Marcelo Ebrard (2006-2012), en donde se construyó la Línea del Metro, la obra carecía de confiablidad, tal vez; los intentos de deslindarlo son un arranque de campaña presidencial, es claro que alguien tiene que limpiar, para que Marcelo, no se ensucie al pasar.
 
 
¿Es una forma de agradecer, que viene desde arriba?
 
En la mañanera de hoy, al hablar sobre la Cumbre de las Américas, el presidente López Obrador dijo: “Si se excluye, si no se invita a todos, va a ir una representación del Gobierno de México, pero no iría yo, me representaría Marcelo Ebrard". Sabemos que no es la primera vez que el Canciller, tiene que dar la cara por el, y eso en algún momento, se tiene que cobrar.
 
¿Se le salieron las cosas de control, y alguien las quiso controlar?
 
Podría decirse que a los dos Márcelos (Ebrard, y Mancera)  les urgía una medalla que colgarse para una posterior candidatura, lo que significó diseñar y construir con prisas, y sin los tiempos necesarios y correctos. Al final el plan no salió como ellos esperaban, en ningún aspecto, pero de todas formas, alguien debía finalizar lo ya comenzado.
 
 
 
Finalizando mi punto, porque es claro que la Jefa de Gobierno no va a permitir que se pueda concluir, solo me queda darle un consejo; Claudia, ya ayudaste a Vietnam, ahora ayúdale tantito a tu carrera política. 
 
 
Ana Alamilla.