La política como vocación: Consejos de Luigi Sturzo para líderes políticos

En un mundo marcado por la complejidad y los desafíos, la política se presenta como una vocación fundamental para aquellos que buscan servir al bien común y construir un futuro mejor. Luigi Sturzo, sacerdote, político y figura clave en la historia de Italia, nos ofrece una valiosa guía para navegar por el complejo mundo de la política, inspirándonos con su visión de una política basada en la ética, la justicia y el compromiso social.

Principios éticos para una acción política efectiva

Sturzo, reconocido por su integridad moral, insistía en la importancia de la ética en la política. Para él, la política no era un mero juego de poder, sino un servicio al pueblo que debía estar guiado por principios como la honestidad, la transparencia y la responsabilidad. En sus palabras:

• “Es el primer canon del arte político ser franco y evitar fingimientos; promete poco y cumple lo que prometes.”

• “Hay quienes piensan que la política es un arte que se aprende sin preparación, se practica sin competencia y se ejecuta con astucia. Es también una opinión muy extendida que la moral común no se aplica a la política, y a menudo hablamos de dos morales, la de las relaciones privadas, y la otra (que no es ni moral ni moralizable) de la vida pública”. 

• "Mi larga y dolorosa experiencia me hace concebir la política como algo saturado de ética, inspirado por el amor a los demás, ennoblecido por el objetivo del bien común".

• “Sobre todo, no actúes como ignorante o presuntuoso. Cuando no lo sabes, necesitas informarte, estudiar, discutir con calma, con objetividad y sin creerte nunca infalible.”
• "Las regiones, provincias y municipios no son simples oficinas burocráticas u órganos delegados, sino que deben tener vida propia, que corresponda a las necesidades del entorno, que desarrolle las iniciativas populares y dé impulso a la producción y al comercio locales."

La brújula moral del líder:

Para Sturzo, un líder político debía ser un modelo de ética y conducta. Su comportamiento debía ser intachable, tanto en el ámbito público como en el privado. Solo así podía inspirar confianza y respeto en la ciudadanía.

• “El examen de conciencia cada noche también es una buena costumbre para los políticos.”

• “Cualquiera que esté demasiado apegado al dinero no debería convertirse en político ni aspirar a puestos gubernamentales. El amor al dinero le llevará a incumplir gravemente sus deberes.”

• “No encubras con tu autoridad las fechorías de tus empleados, que la justicia sea rigurosa también para ellos.”

• “No creas que eres el hombre indispensable, de ahí en adelante cometerás muchos errores.”

• "La moralización de la vida pública es el mejor servicio que se le puede hacer a nuestro país."

• "El divorcio entre la política y la moralidad ha sido fatal para la humanidad."

• "La moralidad es única e indivisible. No hay dos morales, una para las relaciones privadas y otra para las públicas. Si una acción es inmoral para el individuo, también lo es para el alcalde de la ciudad, para el senador del estado, para el presidente de la nación, para todos los ciudadanos unidos."

• "Toda actividad humana como racional está impregnada de ética. Si la economía indicara el beneficio individual, abstraído de la coexistencia de otros individuos, cualquier medio de enriquecimiento individual como el fraude, el robo, la malversación, el engaño, la malversación tendría que ser admitido como económico. La utilidad postula seguridad y orden, que se basan en elementos éticos fundamentales: el respeto a la libertad, la vida y la propiedad de los demás. La economía sin ética es deseconomía." 

Haciendo política con la conciencia:

Sturzo no solo enfatizaba la importancia de la ética individual, sino también la de las instituciones y procesos políticos. Abogaba por un sistema político transparente y responsable, donde las decisiones se tomaran con base en el bien común y no en intereses personales o partidistas.

• “Un programa político no se inventa, se vive.”

• “En política, como en todos los ámbitos de la actividad humana, se necesita tiempo, presencia, espera del sol y de la lluvia, una larga preparación, un trabajo persistente, para luego, finalmente, poder recoger los frutos.”

• “Atender las pequeñas necesidades honestas del ciudadano individual como si fuera un asunto importante (por que lo és) es un buen método de política.”

• "La libertad es como la vida; la vida está presente en todos los actos, en todos los momentos; si no está presente, es muerte"

Liderazgo con principios:

Sturzo creía que un verdadero líder político debía estar guiado por principios inquebrantables, incluso en momentos difíciles. Su visión de la política se basaba en la búsqueda del bien común, la defensa de los más vulnerables y la construcción de una sociedad más justa y equitativa.

• “La política es una síntesis de teorías e intereses, de principios y hechos; La política es vida en el sentido más amplio de la palabra.”

• “La misión del católico en toda actividad humana, política, económica, científica, artística y técnica está enteramente imbuida de ideales superiores, porque lo divino se refleja en todo.”

• “La política es un servicio para el bien común.”

El Estatismo y la Libertad

Con una perspectiva moral inquebrantable, Sturzo, nos alerta sobre los riesgos del estatismo, que subyuga la iniciativa personal bajo el yugo del control estatal. Critica la torpeza administrativa del Estado, incapaz de igualar la eficiencia y astucia del sector privado. Para él, la libertad económica es esencial para el progreso y la prosperidad, y cualquier exceso de intervención estatal no solo falla en su propósito, sino que también amenaza libertades esenciales. 

• "El estatismo y la libertad no son una combinación, son una antítesis. Donde llega el estatismo, cesa la libertad; donde llega la libertad cae el estatismo."

• "El estatismo nunca resuelve los problemas económicos nacionales y, además, empobrece los recursos nacionales y complica las actividades individuales, no sólo en la vida material y empresarial, sino también en la vida espiritual."

• "La supresión de la libertad económica conduce tarde o temprano a la pérdida de otras libertades; Dije y repito que la libertad es total o no es libertad."

• "No es el Estado el que hace que sus órganos sean vitales; es el hombre quien los vivifica, el hombre quien los mortifica, el hombre único y organizado, la persona real y real, no la entidad abstracta que suele llamarse Estado."

• "El Estado es, por definición, incapaz de gestionar una simple zapatería."

• "El comunismo es uno de esos espejismos que no se pueden lograr y nunca se lograrán, incluso si se implementa con violencia y se mantiene por la fuerza."

• "El Estado no crea derechos naturales, sino que debe reconocerlos, armonizarlos, organizarlos y protegerlos."

• "El Estado no tiene espíritu ni voluntad propia; es el resultado político y jurídico del espíritu y voluntad de los miembros o ciudadanos. No es el fin del hombre, sino sólo un medio necesario."

• "Ningún Estado como entidad en sí misma, absoluta, divinizada. "

• "El sector privado utiliza el dinero mucho mejor que el Estado; la productividad de la empresa privada es mayor que la de la empresa pública. Para una política de mayor utilización de la mano de obra, es obligación del Estado no sólo no obstaculizar la inversión privada, sino también estimularla."

• "La libertad es como el aire: vives en el aire; si el aire está viciado, sufres; si no hay suficiente aire, uno se asfixia; si te quedas sin aire mueres"

• "La libertad se logra todos los días, se defiende todos los días, se reconquista todos los días."

La vocacion política de los Cristianos

Sturzo nos enseña que la política no es solo un campo de batalla por el poder, sino un espacio para vivir el evangelio con integridad y sin fanatismos. Sus palabras resuenan con la urgencia de un compromiso que va más allá de lo material, buscando siempre reflejar lo divino en cada aspecto de la vida pública. Es un llamado a los católicos a ser valientes, a mantenerse firmes en sus ideales superiores, y a influir en la política con una perspectiva de eternidad. 

• “Bajar a la lucha política con el evangelio escondido en el pecho, sin estandartes religiosos” 
  
  

• "Si falta el sentido de lo divino, todo se desfigura: la política se convierte en un medio de enriquecimiento, la economía conduce al robo y al fraude, la ciencia se aplica a los hornos de Dachau, la filosofía al materialismo y al marxismo; el arte decae hasta convertirse en prostitución.”
  

• “Espero que los católicos recuperen el valor, sin necesidad de buscar aliados traidores en la izquierda ni colaboradores malévolos en la derecha, sino cuidando de ser ellos mismos, afrontando las dificultades que la vida misma impone.”
  

• “La misión del católico en toda actividad humana, política, económica, científica, artística y técnica está enteramente imbuida de ideales superiores, porque lo divino se refleja en todo.”
  

• "Los católicos que se unen a partidos estrictamente políticos no sólo pierden el sentido del apostolado social y moral que se encuentra en los partidos de inspiración cristiana, sino que se apegan demasiado a los aspectos materiales y utilitarios de la política y ya no distinguen entre lo honesto y lo “cuestionable”. unos. Estos católicos a menudo se convierten en una minoría aislada y sin influencia. Para los católicos, un partido no sólo debe tener un programa político, sino también un programa ideal y moral."

El legado de Luigi Sturzo:

Las palabras de Luigi Sturzo siguen resonando con fuerza en la actualidad, ofreciendo una guía valiosa para los líderes políticos que buscan servir al pueblo y construir un futuro mejor. Su visión de una política basada en la ética, la justicia y el compromiso social es más relevante que nunca en un mundo que enfrenta desafíos complejos y urgentes.

En un mundo que necesita líderes con principios, el legado de Luigi Sturzo nos recuerda que la política puede ser una fuerza para el bien, una herramienta para construir una sociedad más justa y equitativa. Su mensaje nos inspira a actuar con integridad, responsabilidad y compromiso, buscando siempre el bien común.